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Enredar, empoderar, liberar

Jésica Farías
18 de agosto de 2015

Estudiantes de la primera Diplomatura de Operadoras/es Sociales con orientación en igualdad de género y prevención de las violencias de la sede Adrogué realizarán una jornada de reflexión y concientización sobre las agresiones sexistas. Y de paso nos cuentan como avanza su trabajo territorial.

La formula se las trae. Nada de comer, menos que menos rezar: se trata de luchar. De poner el cuerpo decidido para que con cada una, se empodere otra. “Formamos redes de mujeres, nos hacemos amigas, cómplices. Nos parece importante poder hacerlo desde la alegría, compartir la risa, divertirnos, bailar. Eso nos libera”, nos dicen las mujeres de la Diplo, todas cooperativistas de los Programas Argentina Trabaja y Ellas Hacen. Cada viernes, desde las 8, se juntan en la Sede Adrogué -que incluye los partidos de Almirante Brown y Presidente Perón- para formarse como operadoras sociales en Promoción de la Equidad de Género y Prevención de las Violencias. Y el viernes 21, desde las 9, van a compartir todo lo que adquirieron en las capacitaciones con una radio abierta, lectura de reflexiones y difusión de información para abordar las agresiones sexistas en pos de erradicarlas. ¿En dónde? Frente a la estación de trenes de Burzaco (Lado Avenida Espora). También habrá baile.

“Esta es la primera edición de la Diplomatura, somos 25 comisiones en todo el conurbano. Nosotras -explican- estamos en Adrogué y todo lo que aprendemos acá lo replicamos en nuestros barrios, con nuestras familias, amigxs, compañerxs de trabajo, vecinxs. Se va multiplicando es como una bola de nieve”. Las violencias van desde el golpe hasta el maltrato psicológico, pasando por la sexual, la económica y patrimonial, y la simbólica. Frente a ellas, la Diplo abre los ojos, pero también las bocas: identificar las agresiones insta a ir contra ellas.

“Estar acá es comprobar que todo eso que sentimos en el cuerpo no estaba tan errado, que no tenemos porque aguantarlo. Aprendemos a partir de la propia experiencia cuales son los circuitos que hay que recorrer, a que lugares podemos ir a pedir ayuda, adonde denunciar, cuáles son nuestros derechos. Esto nos empodera, nos da legitimidad para trabajar el tema y en cierta forma nos vuelve referentes Aprendimos a defendernos y cuidarnos entre nosotras”, detallan. Y quieren compartirlo.

“La información es clave, saber qué es lo que tenemos que hacer. Sentir que somos muchas, antes no sabíamos que habíamos muchas como nosotras. Ahora sí y somos un montón”, dice una de las Moni del curso. Cada jornada suma al empoderamiento liberador. Cada encuentro permite observar que el patriarcado se cuela en todos los espacios, pero que también hay grietas desde donde se le presenta batalla: “Toda esa gente que se supone que nos tiene que proteger y ayudar, jueces, fiscales, policías, servicios de salud, es toda gente preparada, con estudios, están ocupando cargos de poder y se manejan con una impunidad tremenda para juzgarnos y reproducir lo mismo que denunciamos. Entre nosotras nos tenemos que ayudar, es muy importante lo que estamos haciendo”, reflexiona Isabel.

Proyecciones
Insertarse en las Mesas Locales contra las violencias, en los programas municipales en esa materia pero también en los Centros de Atención Local son las metas de las mujeres de la Diplo. “Encontramos una gran demanda de trabajo profundo en esta problemática. Los espacios que funcionan están desbordados, son muchas las mujeres que sufren violencia y cada vez más las que se animan a denunciarla. Nosotras nos formamos para acompañar esos procesos, para dar talleres, realizar campa?as de sensibilización”, dan cuenta. El horizonte es cada vez más claro y la conexión con otras, y sobre todo con cada una, es poderosa. “Esas conquistas son las que más molestan, las que se instalan en el cuerpo como espacios de resistencia y como formas de liberación. Las que no tienen retorno, porque un fallo se puede apelar pero un orgasmo, no”, terminan. Y así, entre risa, abrazo y concepto, acaban juntas contra el patriarcado. Y con placer.