Cuarenta resistencias
El reclamo de paritarias de docentes y estatales de Chubut lleva cuatro meses. La única respuesta del gobierno provincial fue un aumento mínimo y más represión: balas de goma y gases lacrimógenos, efectivos de Infantería y Geop para agredir a manifestantes que solo tomaban mate en las puertas de la Casa de Gobierno.
Una nueva jornada de violencia y desesperación se vivió ayer en Rawson, donde lo único redondo para la provincia fue el número de días de conflicto consecutivos. En estos casi cuatro meses de resistencia estatal al ajuste, la mejor propuesta que tuvo el gobernador Mariano Arcioni, mientras negociaba paritarias, fue reprimir a los manifestantes con balas de goma y gases lacrimógenos. Tras el exagerado despliegue de fuerzas de Infantería, policía de la provincia y el Geop contra estatales y docentes autoconvocados, es al menos un consuelo no lamentar heridos de gravedad. Entre los manifestantes hay bronca pero no resignación.
Hoy cumple cien días la carpa de protesta instalada en la capital provincial por los gremios que rechazan el cobro escalonado de sueldo, y que encima deben soportar ya un año sin aumentos. “Luche, luche que se escuche” se alientan entre sí, saltando al ritmo de tambores y redoblantes mientras esperan los resultados de la extensa negociación en la puerta de la Casa de Gobierno más custodiada que nunca.
La mejor propuesta que tuvo el gobernador Mariano Arcioni fue reprimir a los manifestantes.
Más violencia
Pasada la una de la madrugada, otra episodio violento. A diferencia de lo ocurrido a la tarde, esta vez no pasa de golpes y empujones entre algunos manifestantes y policías, entre los que se cuentan al menos dos vestidos de civil. Uno de ellos filma con su celular a los docentes que les piden ponerse de su lado. “Ustedes también son laburantes y cobran en tandas como nosotros”, les ruegan. Pero no escuchan; ahí siguen formados, con sus cascos, escudos y armas. ¿Cuánto más?
El ofrecimiento del Gobierno no alcanza y las paritarias de educación parecen ir a un cuarto intermedio hasta el jueves, a pesar de que algunos prefieren seguir negociando esta misma noche, que ya se hace madrugada.
Cien días de lucha en Chubut. Contra el miedo, el bolsillo y la indiferencia.
Entre el cordón que forman los uniformados y algunas fogatas improvisadas para resistir al frío, se juntan en ronda para discutir cómo seguir, pero no dudan: no van a abandonar la lucha.
Cien días de lucha en Chubut. Contra el miedo, el bolsillo y la indiferencia. Se alegran de conocer la noticia de que en otras ciudades de la provincia también se replican medidas de fuerza en repudio a la represión: hay cortes de ruta en Comodoro Rivadavia, y en casi todas las ciudades hubo escuelas cerradas; marchas en Esquel, Puerto Madryn y Trelew. Y Ctera anunció un paro nacional y movilización para el próximo 3 de julio. Trabajadores y trabajadoras estatales pusieron el cuerpo durante todos estos meses. Y ahora saben que no están en soledad.
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